Balonmano

FOTO: EHF

La selección española masculina de balonmano ha debutado en el Europeo de Polonia con un triunfo contra Alemana por 32-29 en un polémico partido en el que equipo arbitral puso más de una zancadilla a los Hispanos con varias acciones más que discutibles.

 

España no estuvo nada cómoda en los primeros minutos de encuentro. Alemania no perdonó en ataque y logró encontrar sin muchas complicaciones posiciones francas de tiro. El 4-6 que reflejaba el marcador a los seis minutos de juego provocó que Manolo Cadenas solicitara un tiempo muerto para pedir una mayor intensidad a sus jugadores.

Las palabras del técnico español surtieron efecto, ya que sus hombres lograron dar la vuelta al marcador con un parcial de 3-0 (7-6). Sin embargo, España no logró despegar en el marcador hasta los 15 minutos de juego (10-10). Arpad Sterbik apareció atrás, la defensa española ajustó sus clavijas y provocó que los germanos fueran un manojo de nervios en ataque.

Todo ello unido a que los Hispanos volaron al contragolpe, provocó que España lograra una renta de siete goles a los 22 minutos (18-11). Sin embargo, a los colegiados franceses Stevann Pichon y Laurent Reveret les pareció que el partido comenzaba a decantarse del lado español demasiado pronto y tomaron medidas para que volviera la igualdad al marcador.

Eduardo Gurbindo y Raúl Entrerríos fueron excluidos y Jorge Maqueda fue expulsado. De todas estas acciones, probablemente, la única que fue merecida fue la roja a Maqueda. De este modo, Alemania recobró la vida y se fue al descanso metiéndose de nuevo en el partido: 18-15.

El polémico final de la primera parte provocó que la segunda comenzara con una imagen, cuando menos, curiosa, ya que España inició este periodo con únicamente tres jugadores de campo. Sin embargo, los Hispanos supieron mantener el tipo en los minutos que estuvieron en esta digamos que 'extrema' inferioridad con un parcial de 1-1 (19-16).

A los 38 minutos de juego saltó a la pista Jorge Cañellas, que había tenido algunas molestias antes del encuentro y que, como casi siempre, ayudó a los Hispanos materializando varios goles. En esta segunda mitad Alemania trató de enseñar los dientes, pero los hombres de Cadenas controlaron bien el partido. No lograron despegarse en el marcador, pero sí que consiguieron mantener siempre una renta de 2-3 goles que provocó que no estuvieran en ningún momento en el alambre. España supo moverse especialmente bien en los laterales en ataque.

El 32-29 final hizo justicia a la superioridad española en un choque en el que Valero Rivera fue el máximo goleador con siete goles y que, como no podía ser de otra manera debido a la actitud que mostraron los colegiados, se cerró con una exclusión española, en este caso de Víctor Tomás. Los Hispanos salen vivos, y reforzados, de la emboscada arbitral que trataron de ponerles los colegiados galos y ya únicamente piensan en su próximo partido: el lunes contra Eslovaquia (18:15, Teledeporte).