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La selección española femenina de balonmano perdió contra Holanda de manera clara por 31-21 en un resultado que le pone al equipo español muy cuesta arriba sus opciones de acabar como líder de su grupo en la actual fase de clasificación para el Europeo.
España empezó a perder el partido antes de jugarlo. El conjunto de Jorge Dueñas apenas dispuso de dos días para preparar el encuentro y eso ante un conjunto como Holanda, actual subcampeona del mundo, se acaba pagando muy caro.
Quizás por ello Dueñas ya intuía que este partido se podía perder, aunque, quizás, lo que no entraba en sus planes es que se cayera de una manera tan contundente. Las Guerreras no estuvieron nunca cómodas sobre la pista y se mostraron muy desconectadas en su juego.
De hecho, las españolas estuvieron muy estáticas en ataque y tuvieron un gran número de pérdidas, lo que provocó que las holandesas dominaran desde el principio en el marcador. Es más, únicamente la soberbia actuación de Silvia Navarro en la portería provocó que España siguiera viva al descanso (13-10).
Nerea Pena, máxima goleadora de las españolas en el partido con nueve goles, trató de echarse al equipo a la espalda y las Guerreras llegaron a ponerse a dos tantos de su rival (14-12) al inicio de la segunda parte. No fue más que un mero espejismo, ya que Holanda, de la mano de Cornelia Groot, una auténtica pesadilla por su movilidad en ataque, volvió a abrir brecha y esfumó cualquier atisbo de remontada española.
A diez minutos del final, Holanda ya había finiquitado prácticamente el choque con una renta de ocho goles (25-17), por lo que 31-21 final reflejó claramente la superioridad de las tulipanes. Toca por tanto ahora levantarse para las chicas de Jorge Dueñas, que el sábado tendrán la oportunidad de tomarse la revancha contra Holanda e intentar amarrar el segundo puesto del grupo con una victoria.
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