Vino a Río a por el oro y se va con él. Es una luchadora, es una campeona, es la número uno de su deporte. Se agotan los calificativos para todo lo que está consiguiendo. Carolina Marín, tras un partido durísimo y precioso en el que se ha impuesto a la india Shindu en tres sets, ha roto otra barrera más en su deporte, ninguna europea se había proclamado nunca campeona olímpica en bádminton hasta este 19 de agosto.
En 2012 una prometedora Carolina Marín de 19 años debutaba en unos JJOO y era eliminada en la ronda de grupos por la china Li Xuerui. A partir de ahí comenzaba un ciclo olímpico en el que su evolución no pararía año tras año, en el que fue encadenando títulos hasta conseguir nada más y nada menos que dos mundiales, dos campeonatos de Europa, dos Súper Series Premier, tres Súper Series, además de ser número uno del mundo. Le quedaba el oro olímpico, que es lo que venía a buscar a Río de Janeiro. El paso de llegar a la final se había conseguido con bastante autoridad, sin ceder un set. El oro se lo iba a jugar con Pusarla Venkata Sindhu de India, 10ª del ranking mundial.
Carolina comenzó el encuentro muy concentrada, dominando el juego, pero su rival no se quedaba atrás, se veía que iba a ser un choque muy igualado, con ambas jugadoras muy agresivas y exprimiéndose por llegar a todos los volantes. La española dominaba 19-17 el primer set, pero Shindu fue capaz de enlazar los cuatro siguientes puntos con un juego brillante y se llevó la manga por 19-21. Había que ganar los dos siguientes. Y consciente de ello Carolina salió a por todas y encarriló pronto el segundo set. Fundamental para la moral de ambas jugadoras, una se crecía y la otra bajaba su euforia por la primera manga. Carolina mantuvo la iniciativa hasta acabar igualando el choque por 21-12, pero pese al marcador no fue nada sencillo, los puntos costaban un mundo por las buenas defensas y ataques de las dos, que siguieron con una tónica parecida en el definitivo tercer set. Al intercambio se llegó con 11-10 favorable a la onubense. El choque siguió apasionante pero los volantes se iban decantando a favor de Carolina. El precioso partido de bádminton acababa con un 21-15 y con Carolina Marín llorando de emoción por el oro conseguido. El oro que había venido a conquistar.
¡¡¡Qué grande eres Carolina!!!
Marín hizo sonar por sexta vez el himno español en Río, escoltada por Shindu y Nozomi Okuhara, que se hacía con el bronce sin necesidad de jugar por la retirada de Li Xuerui, como consecuencia de la lesión que se produjo ayer en los instantes finales de su semi con la española.
Fotos: Diego G. Souto. @COE_es
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