Tenis

Una vez que la temporada ha dado su pistoletazo de salida, cada tarde de domingo nos trae grandes emociones en cuanto al tenis español se refiere. En Rumania llegaron las más relevantes, tan decepcionantes como esperanzadoras. España perdió en Galati y se jugará su permanencia en el Grupo Mundial II de la Copa Federación. Sin embargo, esta eliminatoria ha servido para ver el debut con el equipo nacional de un valor de futuro como Garbiñe Muguruza. De Quito y Zagreb, el domingo trajo buenas nuevas de Guillermo García López y Feliciano López, con un título y una final, respectivamente.

 

Si la primera jornada había tenido un componente de presión ambiental destacado, la segunda de la eliminatoria de Copa Federación entre España y Rumania comenzó por los mismos derroteros. Los locales se aferraban al poderío de la número 3 del mundo para asestar un golpe definitivo al enfrentamiento. La novata Garbiñe Muguruza se presumía la víctima perfecta para aniquilar las aspiraciones españoles. Ese presagio no pudo estar más lejos de la realidad. Muguruza jugó con una categoría acorde a su esperanzador futuro. Comenzó con un par de breaks seguidos, en los que cimentó una rápida victoria en la primera manga. El segundo set fue mucho más igualado. Halep tiró de experiencia para aguantar cada bola lo máximo posible. Muguruza aceptó el pulso y salió vencedora. Con dos break acabó ganando el partido, dejando mudo el Danubio Arena (6-4 y 6-3 en hora y media de juego).

Con todo favor y, bien sea resaltado, la responsabilidad de dar al equipo español el punto definitivo, enfrentó Silvia Soler el partido frente a la rumana Irina Camila Begu. La española, carente de experiencia para afrontar momentos de gran presión, apenas tuvo opciones en la primera manga y, cuando las tuvo en la segunda (llegó a ponerse 4-2 por delante), no pudo aprovecharlas.(6-4 y 6-2). Todo quedó fiado al partido de dobles.

Volvía Muguruza a la pista por tercera vez en dos días, ahora acompañada por Anabel Medina. La inspiración de la hispanovenezolana continuó en el primer set ante la pareja rumana Begu – Nicolescu. Con una manga a favor y un buen comienzo en el segundo set, las españolas dejaron con vida a las rumanas que se agarraron a sus opciones en el partido y lograron empatar el partido. La precipitación y el cansancio de Muguruza en el set definitivo dieron el impulso definitivo a las locales, que lograron vencer en el partido (5-7, 6-3 y 6-2), condenando a España a jugar la eliminatoria por la permanencia en el Grupo Mundial II de la Copa Federación.

En cuanto a la participación masculina de este fin de semana, hay que destacar el exitoso periplo de Guillermo García López en Zagreb. En su séptima final, el albaceteño midió su juego contra el del italiano Andreas Seppi y salió victorioso. Tras ganar en semifinales al chipriota Marcos Baghdatis, García López ya había demostrado un buen nivel tenístico durante la semana en Croacia. El refrendo llegó en dos sets (7-6,  6-3), logrando así su cuarto título ATP, premiado con 250 puntos y una más que posible subida en el ranking.

El otro López de la jornada, Feliciano, disputaba la final del Abierto de Quito ante el dominicano Víctor Estrella. Feliciano llegaba a la cita tras derrotar a Fernando Verdasco en semifinales, mientras que Estrella había apeado a Thomas Bellucci en la ronda anterior. Estrella arrancó el partido con  gran precisión, doblegando con cierta facilidad la resistencia del español en el primer set. Ya en el segundo parcial, el toledano resurgió para nivelar los intercambios, ganando su derecho a pelear por el título en el tie break. El tercer set tuvo muchas alternativas y opciones para ambos. El dominicano tuvo a su alcance el partido logrando un break y sirviendo con 5-4 a favor. Sin embargo, Feli demostró una vez más su categoría para devolver la rotura. El español solo claudicó en la muerte súbita de este tercer set, dejando buenas sensaciones para continuar la temporada en América (6-2, 6-7 y 7-6).