Baloncesto

Increible, espectacular, grandiosa, pueden ser algunos de los adjetivos que pueden definir la victoria de España esta noche en Granada (73-89).

Los actuales subcampeones Olímpicos se marchan de la ciudad nazarí con un balance de cinco victorias y ninguna derrota. Además, tres de ellas han sido ante rivales de la entidad de Brasil, Francia o Serbia.

Y es que este equipo no baja. Tiene hambre, un hambre voraz. Únicamente piensa en ganar. Da igual si ya tenía la clasificación a la segunda fase como primero de grupo. Eso parece lo de menos. Ésto ha sido un estímulo más que ha hecho que hoy disfrutaran ellos, y por consiguiente, el público que abarrotaba el Palacio de los Deportes.

España comenzaba algo despistada. Ésto duró el tiempo que Ricky Rubio tardó en coger el calor necesario para hacerse con el mando del partido. Con un quintento sin cambios pese a tener cerrado el pase desde ayer, los nuestros comenzaron a jugar y a dar espectáculo. El equipo fue aumentando su intensidad defensiva a la par que su acierto en el lanzamiento. La conclusión de la suma de estos factores era clara, España +12 (16-28) y tiempo muerto solicitado por Djordjevic para frenar la sangría. Serbia volvió con aires nuevos que cortarían un Juan Carlos Navarro y un Pau Gasol, ambos con diez puntos a la conclusión del primer acto (20-34).

Comenzaba el segundo periodo, y con el, el "Show Time" de nuestra selección. La zona era territorio comanche para los balcánicos, y los robos y salidas al contraataque de los españoles se repetían una y otra vez. Como resultado un 25-41 a falta de 6.05 para el descanso, y nuevo tiempo muerto solicitado por los serbios. Serbia se estimuló, y con dos triples consecutivos bajaba la diferencia a diez puntos (31-41). Ahora era Orenga quien lo paraba para que España volviera a ser ella misma. Intensa, incisiva, robando balones y corriendo hacia canasta contraria. Así se abría de nuevo la brecha en un electrónico con el que se llegaría al término de este segundo parcial (30-54).

En la reanudación, Ricky, el descarado de El Masnou, seguía haciendo de las suyas. Reiteraba en meter balones a unos hermanos Gasol que culminaban las asistencias del base catalán. Sus manos las más rápidas en dejar sin balón al jugador que tuviera delante. Era imposible pararle. Estaba en modo "abusón", como cuando el público del Olímpic de Badalona se rendía constantemente a su baloncesto. Con este control del juego, el marcador no sufría demasiados cambios a falta de los últimos diez minutos por disputar (56-71).

El postrero cuarto de esta primera fase se preveía de puro control. Bajo la batuta del "Chacho" Rodríguez, salido antes de concluir el parcial anterior, el equipo se atascó en la parcela ofensiva. España bajó algo su intensidad atrás y ésto lo aprovechó Serbia para situar la diferencia en la barrera psicológica de los diez puntos. Pero era el día de un hombre, Ricky, otra vez él. Sus puntos y manejo, junto a un José Manuel Calderón perfecto hoy en el lanzamiento, devolvían todo a su lugar.

Nuevamente, los últimos instantes servían para dar minutos a los menos habituales como Abrines o Claver, los cuales pueden ser fundamentales cara al tramo final del campeonato.

Por tanto, una España invicta y primera de grupo, se enfrentará en octavos de final a Senegal el próximo sábado.

RESULTADOS GRUPO A:

  76 - Irán - Francia - 81

128 - Brasil - Egypto - 65.