Aguas Tranquilas

Foto: RFEPIRAGÜISMO 

Se nos quedó corta la cosecha de medallas. Dos bronces conseguidos por Saúl Craviotto en K1 200m y Marcus Cooper Walz en la modalidad no olímpica de K1 500m, ha sido el balance de metales españoles en el Campeonato del Mundo de Piragüismo que se ha disputado en Moscú. Destacamos también el cuarto puesto de Sete Benavides en C1 200m. Y una pena la rotura de timón del K4 1000 cuando estaban peleando por las medallas.

 

Saúl Craviotto, como siempre, no falló y consiguió la medalla de bronce en K1 200m. Eso sí, esta vez nos hizo sufrir más de la cuenta porque la llegada fue tan ajustada que hizo el mismo tiempo -34.270- que el británico McKeever, oro en los Juegos de Londres donde Saúl fue plata, por lo que ha compartido la presea con él.

El otro velocista español, Sete Benavides, se quedó una vez más con la miel en los labios. Otro cuarto puesto en C1 200m como ya sucediera en los Juegos Olímpicos de Londres. Aunque esta vez, esa medalla de chocolate tiene más mérito porque el balear salía desde la calle 9 que siempre es un hándicap en contra.

Completaba el doblete de medallas Marcus Cooper Walz. El joven de 19 años conseguía la medalla de bronce en la prueba de K1 500m. Un metal que bien podía haber sido oro o plata por lo ajustado de la regata. Walz, que iba primero al paso por los 250m, marcó un tiempo final de 1:39.692 mientras que el vencedor, el danés Poulsen hizo 1:39.190 y el segundo, el húngaro Dombvári paró el crono en 1:39.351. Recordemos que Walz venía de ser Campeón del Mundo Sub23 en K4 1000m hace pocas semanas. Sin duda, un valor seguro para el futuro.

El colmo de la mala suerte

Precisamente la desgracia de la jornada le ocurrió al K4 1000m de Javier Hernanz, Rodrigo Germade, Iñigo Peña y Oscar Carrera. A falta de 300m para el final y cuando marchaban en segunda posición se les rompió el timón de la embarcación y quedaban finalmente descalificados al invadir la calle de al lado y casi volcar la embarcación de los portugueses que terminaron segundos. Una rotura completamente inusual por un material defectuoso como nos contaba Javi Hernanz desde Moscú. Las grandes sensaciones que han dejado nos hace albergar esperanzas de que este cuarteto conseguirá la clasificación olímpica en el Mundial de 2015.

Del resto de finales A en modalidades no olímpicas, en K2 500m Rubén Millán y Diego Piña concluyeron en una meritoria sexta plaza, teniendo en cuenta que salían por la calle 9. Por su parte, el dúo formado por Raquel Rodríguez y Jenifer Casal fueron novenas en la final de C2 500m. Por la tarde se celebraron los relevos y tanto el K1 200m –Saúl Craviotto, Cristian Toro, Carlos Arévalo y Carlos Garrote- como el C1 200m –David Cal, Sete Benavides, Adrián Sieiro y André Oliveira- terminaron en sexta posición. El K1 200m femenino no se clasificó para la final.

El futuro está asegurado

En cuanto a las finales B, grandes actuaciones de los españoles. Cristian Toro y Carlos Arévalo ganaron la prueba de K2 200m demostrando que cada vez están más cerca de los mejores y que su sitio está en la final A. Tres segundos puestos, de los prometedores jóvenes Adrián Sieiro en C1 500m y Patricia Coco en C1 200m y de Yeray Picallo y André Oliveira en C2 200m. Además, en C2 1000m, Manuel Antonio Campos y Diego Romero concluyeron su participación en cuarto lugar, la misma posición que Isabel Contreras en K1 500m. Miriam Vega y Begoña Lazkano terminaron quintas en K2 200m.